Las durezas en los pies, también conocidas como hiperqueratosis, se producen debido a una presión excesiva sobre una zona concreta de los pies, lo que causa molestias y afecta el aspecto de nuestros pies. Esta condición es muy común y se estima que un 47% de la población sufre de durezas en los pies. Pero, que sean frecuentes no implica que no podamos eliminarlas de forma efectiva para lucir pies sanos y hermosos. En este artículo de Scholl te explicamos qué es la hiperqueratosis, cómo se forma y cómo eliminar las durezas de los pies y devolverles la suavidad perdida. ¿Qué son las durezas de los pies? La durezas son trozos de piel engrosada y dura que se forma debido a una presencia excesiva de células muertas en la capa superficial de la piel. Las zonas de piel endurecida suelen presentarse alrededor del talón o en la almohadilla de la planta del pie. Esta piel endurecida normalmente es más gruesa y menos sensible al tacto que la piel circundante. Aunque no suelen ocasionar dolor ni tampoco representan una amenaza para la salud de nuestros pies, lo cierto es que las durezas son poco estéticas y afectan la apariencia de los pies, especialmente cuando usamos zapatos que dejan zonas como el talón al descubierto o cuando vamos descalzos. Causas de las durezas de los pies Las durezas de los pies se presentan por una acumulación y un endurecimiento de las células muertas de la piel, que hacen que la capa exterior de esta resulte más gruesa. Este engrosamiento es un mecanismo de defensa del cuerpo cuando existe un exceso de presión, roce y fricción. La presión puede presentarse por un factor externo, por ejemplo el tipo de zapatos que usamos, o por un factor interno, por ejemplo el modo en el que andamos o una deformación en nuestro pie que produzca mayor presión en una zona específica al caminar. La aparición de durezas puede tener muchas causas, las más frecuentes son: Uso de calzado inapropiado Utilizar zapatos que nos quedan muy ajustados o sueltos, o abusar de aquellos modelos que dejan al descubierto nuestros talones, como las sandalias o chanclas, pueden influir en la aparición de las durezas en los pies. Si nuestros pies no tienen el soporte que necesitan se pueden generar puntos de presión que acaben en una hiperqueratosis. No usar calcetines con los zapatos cerrados El hábito de utilizar zapatos cerrados sin calcetines también ocasiona durezas, pues se incrementa el roce de la piel contra el zapato en puntos sensibles como el talón o las almohadillas. Falta de hidratación y exfoliación La piel de los pies es más gruesa que la del resto del cuerpo, por lo que necesita una rutina de hidratación y exfoliación que ayude a mantener a raya las células muertas. Si no lo hacemos con frecuencia, es normal que las células muertas se acumulen en ciertas zonas y acabemos teniendo durezas en los pies. Problemas en la pisada o deformidades Una pisada incorrecta puede generar presión en ciertos puntos del pie, lo que acabará conduciendo al engrosamiento de la piel en las zonas que sufren más esa presión. Además, otros problemas como los juanetes o los dedos en garra, que también repercuten en la pisada, pueden acabar ocasionando este problema. Si este es el caso, la recomendación es visitar a un podólogo para intentar corregir la causa del problema y reducir la formación de durezas. Durezas y callos ¿son lo mismo? Aunque con frecuencia se confunden, las durezas y los callos duros no son lo mismo. Ambas condiciones están causadas por el exceso de presión o fricción en una zona del pie, pero cuentan con síntomas muy diferentes. Los callos duros se presentan en un área pequeña y localizada, normalmente encima de los dedos o en el lateral del pie, y cuentan con una forma redondeada y definida. Callo duro en el lateral del pie En cambio, las durezas se presentan en zonas más extensas de la piel, normalmente en el talón o en la almohadilla del pie, cuentan con una textura rugosa y no presentan una forma definida como el callo duro. Dureza en el talón Aunque la presión y roce excesivo es la causa de ambas condiciones, su tratamiento es diferente. El callo requiere de la aplicación de productos especiales para su eliminación, mientras que podemos eliminar las durezas en los pies con un correcto hábito de exfoliación e hidratación, así como limitando cierto tipo de hábitos. ¿Cómo eliminar las durezas de los pies? Eliminar las durezas de los pies debería formar parte de una rutina de cuidado frecuente. Básicamente consiste en eliminar las células muertas mediante la exfoliación periódica e hidratar la zona para mejorar su humectación. Exfolia tus pies con frecuencia La exfoliación es un proceso mediante el cual eliminamos las células muertas que se acumulan en la piel con el fin de renovarla. Debido a que las durezas en los pies se forman por una acumulación de células muertas en zonas concretas, exfoliarlas será básico para su eliminación. Para ello puedes usar métodos como la piedra Pómez o la lima manual de talones, que sirven para arrastrar las células muertas al limar la capa superficial de la piel, ayudando a reducir las zonas de piel endurecida. Pero si buscas resultados efectivos y rápidos para quitar las durezas de los pies, entonces te recomendamos la lima electrónica de Scholl con recambio exfoliante, que elimina las durezas y ayuda a reducir la piel seca y escamada gracias al cabezal exfoliante, siendo efectiva tanto en piel seca como mojada. Esta alternativa electrónica es una manera de quitar las durezas de los pies rápido y sin necesidad de prácticas como ponerlos en remojo, por ejemplo. Cómprala ahora Además de facilitar la eliminación de durezas con la lima electrónica, su uso frecuente favorece la penetración de la crema hidratante en tus pies, ayudando a mantener la sequedad al margen. Hidrata la piel de tus pies como parte de tu rutina No basta solo con exfoliar la zona, también es importante que aportes a tus pies la hidratación que necesitan con una crema especial para esta zona. Por eso , si quieres eliminar las durezas de los pies y evitar que reaparezcan, se recomienda mantener siempre tus pies hidratados aplicando a diario una crema especial para la zona, como la crema para durezas de Scholl. Esta crema de Scholl reduce las durezas en solo 7 días, suavizando y alisando la piel con una efectividad clínicamente probada. Además no tiene perfume y cuenta con una textura no grasa que hace que su aplicación sea muy sencilla. Lo ideal es aplicarla antes de dormir para que pueda actuar durante la noche, proporcionando máxima hidratación. Cómprala ahora Nútrelos con una mascarilla para pies La hidratación es clave para prevenir las durezas, por eso las mascarillas para pies son una gran alterativa, pues aportan una nutrición profunda para mantener la sequedad a raya. La mascarilla de pies Scholl, elaborada con la tecnología Hidro-Restore, está clínicamente probada para ofrecer hasta 24 horas de hidratación incluso en las capas más profundas de la piel gracias a su contenido de aceite de macadamia, manteca de karite, urea y pantenol. Si la incluyes periódicamente en el cuidado de tus pies conseguirás nutrir la piel de esta zona potenciando su hidratación. ¡Descúbrela! ¿Cómo prevenir las durezas? Quitar las durezas de los pies evita que la piel se deshidrate, se inflame y se agriete, algo que puede resultar especialmente molesto y doloroso, pudiendo conducir a la formación de talones agrietados. ¿Qué puedes hacer para prevenir las durezas en los pies? Sigue las siguientes recomendaciones para conseguirlo con éxito: Utiliza calzado cómodo y biLen ajustado que ofrezca la amortiguación adecuada en la zona del talón. Además es recomendable usar plantillas de gel para reducir el impacto en esta zona y aumentar la comodidad. Rota tu calzado y evita usar siempre el mismo modelo, de este modo evitarás la presión e impacto constante en una misma zona. Es importante que en los meses de más calor alternes el calzado y no uses únicamente modelos abiertos, de ser así, recuerda hidratar más tus pies. Usa siempre calcetines cuando lleves zapatos cerrado, de este modo reducirás el roce de la piel contra el zapato, disminuyendo la posibilidad de sufrir de durezas en lo pies. Practica una rutina de cuidado de tus pies, exfoliando con frecuencia la zona e hidratando la piel cada día. No olvides que también deberás hidratar tu cuerpo desde adentro, por lo que es recomendable que bebas al menos 2 litros de agua para mantener la salud de tu piel. Si tienes problemas en la pisada o deformidades en los pies, visita al podólogo para una evaluación a medida que te permita mejorar la salud de tus pies y reducir la formación de durezas. Fuentes: Footcare Issues, Incidence & Treatment Rates. Harris Interactive. Global Report: March 2018.
Si eres de las personas que sufren molestias en los pies, piernas, rodillas o tobillos tienes que saber que existen recursos para maximizar tu confort y amortiguar los impactos, por ejemplo elegir unas buenas plantillas y usarlas día a día. Pero ¿por dónde comenzar y cuáles son las más adecuadas? En este artículo compartimos contigo algunos consejos para elegir las mejores plantillas para tus pies. ¿Para qué tipo de actividad necesitas tus plantillas? Una de las primeras cosas que debes preguntarte antes de elegir unas plantillas es el tipo de uso que les darás y para qué tipo de actividad las necesitas. Las plantillas Dr. Scholl GelActiv™ han sido diseñadas para tres tipos de necesidades diferentes: para uso diario, para hacer deporte y para el trabajo, independientemente de la actividad que practiques. Y aunque sirven tanto para hombres como mujeres, cada modelo se adapta a unas tallas diferentes. A continuación analizamos las características de las tres variedades y cómo pueden ayudarte: • Plantillas para uso diario: Estas plantillas son polifacéticas y muy adecuadas para el calzado más casual. Están diseñadas para ofrecer un increíble confort y el gel que contienen sirve para aumentar la sensación de amortiguación contra los impactos. Además, también son ideales para cualquier persona que tenga las piernas cansadas al final del día, si caminas mucho, si haces cola en los supermercados o si te gusta viajar en plan turístico, este tipo puede adaptarse a ti. • Plantillas Sport: Están especialmente diseñadas para la práctica de actividades físicas, ya sea para ir al gimnasio, andar por el parque o correr. Teniendo en cuenta que el deporte exige hacer un gran esfuerzo con los tobillos, las rodillas y los talones, la tecnología GelActiv™ ayuda a amortiguar los impactos en estas articulaciones. • Plantillas Profesionales: Este tipo de plantillas es recomendable para aquellos trabajos en donde caminar o estar de pie durante largos períodos es parte de la rutina. Si trabajas en la construcción, en una empresa de catering o incluso en un barco y te pasas horas y horas de pie deberías usar estas plantillas, ya que ayudan a absorber los impactos generados por estar de pie durante períodos de tiempo muy prolongados. Además tienen un tejido transpirable que ayuda a mantener los pies secos. Plantillas que se adaptan a tu tipo de zapato Otro punto a tener en cuenta para conseguir un mayor confort es elegir el calzado más conveniente para mantener la salud de tus pies, incrementando su comodidad con las plantillas adecuadas. Escoger zapatos de buena calidad y con una suela blanda que amortigüe es lo ideal, especialmente si pasamos mucho tiempo de pie o caminando. Sin embargo, son muchas las ocasiones en las que el estilo prevalece por encima de la comodidad. Por ejemplo, en el caso de muchas mujeres, usar tacones es parte de la rutina diaria, pero dependiendo del diseño del zapato, pueden también generar dolor y cansancio en la zona. Para reducir las molestias, puedes optar por unas plantillas de gel para tacones de uso diario o para tacones muy altos, que te ayudarán a estar mucho más cómoda día a día. Del mismo modo, los zapatos planos, como las bailarinas, al carecer del soporte adecuado, también pueden incrementar las molestias con el uso diario. En esta caso, las plantillas para zapatos planos son un buen aliado. Descubre la gama de plantillas para tacones Otras recomendaciones para garantizar la salud de tus pies Además de mejorar la comodidad de tus zapatos con las plantillas adecuadas, es importante que no te olvides de rotar los zapatos o zapatillas que te pones a diario y de intentar no usar el mismo par durante más de dos días seguidos, de esta forma evitarás el uso de un calzado húmedo que pueda afectar negativamente a la salud de tus pies. Intenta elegir piezas elaboradas con materiales flexibles que permitan la adecuada transpiración de tus pies. Por último es esencial que, si compras un par de zapatos nuevos para un evento importante, los adaptes progresivamente a tus pies para garantizar una mayor comodidad, especialmente cuando se trata de tacones. Ahora ya sabes cómo elegir las mejores plantillas para tus pies y qué tener en cuenta para mantenerlos sanos día a día, ¡sigue estos consejos y cuida esta importante zona!
El mal olor en los pies es una condición que suele generar cierta vergüenza, sin embargo, resulta más común de lo que pensamos. Se estima que el 45 % de la población sufre de mal olor en los pies. Para evitar que te huelan los pies, lo primero es entender las razones por las que se produce el mal olor en los mismos. La clave está en la acumulación de humedad, pues da lugar a la proliferación de bacterias y de hongos que, al descomponerse, originan el mal olor. Las bacterias se alimentan de aceites y células muertas de la piel y eliminan unos productos de desecho que son los que despiden el mal olor. Por eso, los consejos para que no huelan los pies se centran en controlar el aumento de la humedad que se propicia por una sudoración excesiva o hiperhidrosis, la cual se ve agravada debido a que los pies son una zona pequeña que suele estar tapada y poco ventilada y en la que se concentran un elevado número de glándulas sudoríparas. El mal olor corporal que suele asociarse a esta sudoración excesiva se denomina bromhidrosis. También influyen en este trastorno el uso de un calzado o unos calcetines inadecuados, un deficiente secado de los pies o una higiene inapropiada. A continuación, ofrecemos diversas recomendaciones para evitar el mal olor de pies efectivamente. Recomendaciones para que no te huelan los pies Higiene saludable Lava tus pies a diario o, de ser necesario, varias veces al día, con una ducha o un baño y aplicando un jabón suave con agua templada. Incide bien entre los dedos tanto para limpiar como para secar, pues en esta zona suele acumularse más la humedad, lo que puede dar origen a problemas como los hongos en los pies. Las uñas también deben mantenerse limpias y bien recortadas con la finalidad de prevenir otras condiciones, como los hongos en las uñas. Si tus pies sudan en exceso, utiliza jabones específicos que ofrezcan una actividad antibacteriana o polvos para eliminar este sudor. La importancia de secarse los pies Presta atención al secado de tus pies, no solo es importante que los seques con cuidado tras cada ducha, poniendo especial atención en las zonas entre los dedos, sino que es fundamental que no utilices calcetines ni zapatos que se encuentren mojados o húmedos, ya que constituyen un ambiente ideal para el crecimiento de las bacterias y de los hongos. Para evitar que te huelan los pies, usa calcetines limpios y asegúrate de que tus zapatos están secos antes de volver a ponértelos, de allí la recomendación de intentar rotar el calzado para asegurarte que se seca bien antes de usarlo nuevamente. Cambia de calzado y de calcetines Este punto es en particular importante si disponemos de calzado deportivo específico que utilizamos para practicar ejercicio, ya que será más fácil que acumule sudor. Podemos contar con más de un par de zapatos para no tener que utilizar nunca el calzado mientras esté sudado. Además, es importante dejar que se aireen para evitar que proliferen las bacterias. En algunos modelos, es posible extraer las plantillas y lavarlas con regularidad. También pueden cambiarse por unas nuevas y limpias o escogerlas con propiedades que ayuden a controlar este problema, como es el caso de las plantillas deportivas de Scholl, que eliminan el olor y absorben el sudor. La misma recomendación aplica para los calcetines, que deben cambiarse a diario y no reutilizarse. Descubre nuestra gama de plantillas Deja que tus pies transpiren Otro de los consejos para que no huelan los pies es comprar un calzado adecuado que permita que los pies se ventilen de forma apropiada, como es el caso de los modelos elaborados en piel o en tela. Huye de los materiales sintéticos que dificulten la evaporación del sudor y siempre que sea posible, airea los pies y utiliza en cada momento los zapatos que mejor se adapten al clima y a la actividad que vayas a realizar. Utiliza un desodorante para tus pies El desodorante para pies consigue eliminar el olor y proporciona una agradable sensación de frescor. El desodorante Scholl Step Frescor Duradero ofrece hasta 24 horas de protección gracias a su efecto antitranspirante. Además, elimina el olor al instante, reduce la humedad y tiene una acción secante. Sin duda, un aliado básico para evitar el mal olor de pies y mantenerlos frescos. Cómpralo ahora Usa también un desodorante para tus zapatos Este consejo para que no huelan los pies puede aplicarse a todo tipo de zapatos, pero es especialmente importante para el calzado deportivo, sobre todo, el que se utiliza para el desempeño de actividades físicas intensas. Scholl Fresh Step Polvos 2 en 1 para pies y calzado impide que se produzca mal olor, absorbe la humedad y consigue un efecto antitranspirante. Ofrece hasta 24 horas de protección al controlar la aparición de las bacterias que se vinculan al mal olor. Como su nombre indica, se recomienda su uso tanto sobre el calzado como en los propios pies. Aplicado en ambos ofrece una mayor protección. Cómpralo ahora Elige bien tus zapatos Independientemente del modelo, lo que se aconseja es que sean de calidad y que estén confeccionados con piel suave y flexible, cuero o tejidos naturales como el algodón, ya que son los que permiten la transpiración y la absorción del sudor, manteniendo el pie a una temperatura adecuada. Además, los zapatos no tienen que apretar el pie, ni por un tamaño insuficiente ni por unos cordones atados muy fuertemente. Deben resultarte cómodos y ser de tu talla. Se recomienda descartar materiales no transpirables como el plástico, la goma o los tejidos sintéticos, que aumentan la temperatura de los pies. Este tipo de zapatos no deberían usarse más que unas pocas horas. De esta manera, se reduce el calor y la humedad que se produce en los pies. Escoge un calzado acorde con las condiciones climatológicas del momento. Por ejemplo, ante altas temperaturas, opta por las sandalias. Si los zapatos se mojan o se humedecen, cámbialos lo antes posible. Presta especial atención a las zapatillas deportivas y al calzado de trabajo, ya que no siempre están fabricados con materiales transpirables, y si te decantas por un calzado lavable, mucho mejor. Por último, recuerda que hay que mantener los zapatos limpios tanto por dentro como por fuera. Cambia cada día tus calcetines Es recomendable que sean de algodón porque este material absorbe la humedad, también pueden utilizarse de lana o de hilo. Por este mismo motivo, conviene evitar las fibras sintéticas como el nailon. Es adecuado sustituir los calcetines por unos limpios si los notas humedecidos o te sudan mucho los pies. En función de tus características y actividad, es posible que necesites cambiarlos más de una vez al día. Recuerda también que existen calcetines fabricados para realizar deporte que ayudan a reducir el sudor y el consiguiente olor. Con estas recomendaciones para que no te huelan los pies podrás reducir esta molesta condición y mantenerlos sanos día a día. Fuentes: Footcare Issues, Incidence & Treatment Rates. Harris Interactive. Global Report: March 2018.
Aunque parezca difícil sudar en temporada invernal, lo cierto es que es no es extraño que los pies sí sean propensos a la sudoración en esta época del año. Pero, te preguntarás: ¿por qué me sudan los pies en invierno? Esta condición se debe a que, precisamente como protección contra el frío y la lluvia, se utiliza un calzado muy abrigado o impermeable, que está confeccionado con materiales que no permiten una transpiración adecuada del pie. Las botas de invierno, el calzado diseñado para la lluvia o los calcetines muy gruesos, pero, también, elementos ambientales como la calefacción, se encuentran entre los factores que incrementan las posibilidades del sudor de los pies en invierno, situación que se agrava debido a que estos cuentan con un elevado número de glándulas sudoríparas. Por otra parte, en determinadas épocas de la vida, como la pubertad y la adolescencia, hay una mayor propensión a sudar, como consecuencia de los cambios hormonales que se producen. El sudor en los pies es un problema común que puede generar condiciones molestas, como el mal olor en los pies, pues la humedad propicia la formación de bacterias y hongos que, al descomponerse, ocasionan mal olor. De hecho, se estima que 45% de la población sufre de mal olor en los pies, por ello atender y controlar la causa de la sudoración será indispensable para evitar esta molestia. El control del sudor de los pies en invierno y de su mal olor pasa por la adopción de todas las medidas que favorezcan la transpiración de los pies y nos ayuden a evitar un exceso de humedad. Cómo evitar el sudor en los pies en invierno Una vez que entiendes por qué te sudan tanto los pies, incluso en la época más fría del año, puedes seguir las recomendaciones a continuación, que tienen como objetivo mantener la salud del pie y evitar los problemas de sudoración y mal olor. Elige calcetines de materiales adecuados El tejido con el que se confeccionan los calcetines es esencial para el control de la sudoración, ya que de ellos depende la transpiración adecuada del pie. El algodón es un ejemplo de material que se puede utilizar durante todo el año con comodidad. Además, en invierno también puedes recurrir a los calcetines de lana. Al contrario, los tejidos sintéticos se asocian a un aumento excesivo de la temperatura de los pies, lo que propicia el sudor y la retención de humedad. Además de atender a la composición de los calcetines, es importante que te los cambies cada día y siempre que los notes algo mojados por sudor. Escoge zapatos que favorezcan la transpiración del pie Es fundamental que te fijes en el material del que están hechos tus zapatos y des prioridad siempre a los productos naturales frente a los sintéticos o los plásticos. Estos últimos no permiten la transpiración imprescindible para el pie, por ello no se recomienda su uso, al menos durante muchas horas seguidas. Por otra parte, no conviene que permanezcas con los zapatos mojados y, si es posible, no los lleves puestos durante todo el día. Además, aunque parezca evidente, no está de más recordar la necesidad de calzar siempre unos zapatos de talla adecuada, que te resulten cómodos y que se adapten a la climatología y a la actividad que vas a realizar. Ten en cuenta que un pie apretado tiene más posibilidades de sudar. Por último, si recurres a las plantillas, asegúrate de que también permitan la transpiración. La gama de plantillas de uso diario, deportivas y profesionales de Scholl eliminan el olor y absorben el sudor, por lo que son una buena alternativa para aportar una como0didad extra ayudando a controlar el sudor de los pies en invierno y verano. Descubre la gama de plantillas Scholl Cumplen con la normativa de productos sanitarios Usa un desodorante para pies para controlar el sudor y el olor El desodorante Scholl Fresh Step Frescor Duradero está especialmente formulado para esta parte del cuerpo y te ayudará a combatir el sudor en los pies. Ofrece una protección antitranspirante de hasta 24 horas, elimina el olor al instante y proporciona una agradable sensación de frescor. Además, reduce la humedad gracias a su acción secante. Cómpralo ahora Además, y con la finalidad de combatir también el mal olor en tu calzado, puedes optar por un producto adecuado también para los zapatos. Los Polvos 2 en 1 para pies y calzado de Scholl están desarrollados con la fórmula Tri-Active, que protege los pies del mal olor y la sudoración durante 24 horas, y puede usarse también en los zapatos deportivos o de uso diario para una mayor protección. Mantén una buena higiene día a día Se recomienda una limpieza diaria de los pies, para lo que puedes usar un jabón neutro. Otro tipo de productos específicos deben ser prescritos por el profesional. Es importante lavar bien incluso los espacios entre los dedos, además, la higiene correcta incluye el corte de las uñas. En espacios públicos, como piscinas, evita el contacto directo con el suelo y protege tus pies utilizando un calzado apropiado lo cual te ayudará a prevenir la aparición de pie de atleta y hongos en las uñas, así como el contagio de otras condiciones, como las verrugas en los pies. Seca bien tus pies tras el baño Que la humedad permanezca en la piel de los pies es un factor de riesgo para la proliferación de microorganismos y el consiguiente mal olor que acaban por desencadenar. Para evitarlo, al salir de la ducha o de la piscina, sécate bien con una toalla, prestando especial atención a las zonas entre los dedos. Intenta alternar tus zapatos Cambiar de calzado con regularidad favorece la salud de los pies y, además, hay que hacerlo siempre que los zapatos que llevemos se mojen. De esta forma permitimos que el calzado que acabamos de usar se ventile y se seque por completo. Esto es especialmente importante cuando hablamos de calzado deportivo, ya que lo usamos para la realización de actividades intensas que se relacionan con un aumento de la sudoración. Si la sudoración es excesiva, visita al médico Con los consejos anteriores es posible controlar el sudor en los en invierno, sin embargo existen ciertas condiciones que se relacionan con la producción de una sudoración excesiva en los pies o generalizada y estos casos pueden requerir la ayuda de un especialista. Hablamos de hiperhidrosis o de bromhidrosis. Hiperhidrosis es el nombre que recibe la sudoración excesiva, que no siempre se relaciona con una causa reconocible, como el calor o la actividad física. La bromhidrosis, por su parte, hace alusión a un mal olor corporal exagerado y anormal, debido a la descomposición que realizan tanto bacterias como levaduras de la secreción de las glándulas sudoríparas, es decir, del sudor, y de los residuos celulares. Por lo tanto, si crees que es tu caso y la cantidad de sudor que emites sigue siendo elevada o el mal olor no remite a pesar de poner en práctica las medidas anteriormente expuestas, no dudes en acudir a tu médico.
Los hongos en las uñas son muy comunes y pueden aparecer en cualquier uña, aunque son más frecuentes en las de los pies. Si sufres de hongos en las uñas, puedes llegar a sentirte inseguro debido a su desagradable aspecto. Además, en algunos casos, son hasta dolorosos. Por suerte, existen tratamientos sencillos y efectivos para este tipo de infecciones. Te invitamos a leer nuestros consejos y sugerencias, y así podrás detectar cualquier signo de infección, conocer las causas, saber cómo eliminar esta clase de hongos y evitarlos en el futuro. Causas de los hongos en las uñas de los pies Una infección por hongos en las uñas puede ser causada por diferentes tipos de hongos, como por ejemplo el de la cándida, responsable de la candidiasis bucal. Pero la causa más habitual es el mismo hongo que provoca el pie de atleta, el conocido como hongo dermatofito. Los hongos normalmente están presentes en el cuerpo tanto de forma interna como externa junto a distintas bacterias. Cuando crecen demasiado, es cuando corres riesgo de infección. Los hongos en las uñas se dan cuando las esporas de un hongo se abren paso entre la uña y la piel de debajo y se alimentan de la propia piel o de la queratina de la uña. Detectar una infección de hongos en las uñas Los hongos en las uñas se desarrollan con el tiempo. Existen varios signos evidentes de infección por hongos en las uñas de los pies. Los podrás detectar cuando: Las uñas de los pies empiezan a verse opacas y pierden su brillo natural. Se da una ligera decoloración de uñas alrededor del borde. Hay manchas blancas o amarillentas en medio de la uña. Se engrosa la uña o se vuelve quebradiza. La uña se despedaza y se rompe, o incluso se separa del lecho ungueal. Sientes incomodidad al usar zapatos, al caminar o al estar de pie durante mucho rato. Un cambio progresivo en el color de las uñas podría indicar la presencia de hongos Si detectas alguno de estos síntomas, no los ignores. Cuanto antes empieces a eliminar los hongos en las uñas de tus pies, más fácil será combatirlos y menos posibilidades tendrán de propagarse a otras uñas. Además, los hongos de uñas y el pie de atleta están vinculados al mismo hongo, por tanto el pie de atleta podría provocar hongos en las uñas, y viceversa. Cómo curar los hongos en las uñas de los pies: tratamiento Ante cualquier signo de hongos en las uñas, toma medidas cuanto antes. Existen diversos tratamientos para curarlos, pero lo importante es siempre acudir a una opción profesional y farmacéutica, sin optar por remedios caseros porque no son efectivos. El tratamiento dependerá del grado de infección y también de las preferencias de cada persona. Sin embargo, incluso el mejor tratamiento para los hongos es solo efectivo si se aplica regularmente y desde el primer momento. Si el hongo está en una fase inicial o intermedia, podrás eliminarlo con un medicamento de venta libre en farmacias, como el tratamiento para hongos en las uñas de Scholl, que combate el hongo de raíz y ayuda a prevenir su extensión y reaparición. Cumple con la normativa de productos sanitarios. Cómpralo ahora Prevenir una infección por hongos en las uñas Los hongos en las uñas y los hongos en general crecen y se propagan en ambientes húmedos y cálidos. Y aunque resulte imposible evitarlos por completo, hay medidas muy simples que te ayudarán a reducir el riesgo, como, por ejemplo: Usa zapatos bien ajustados para que tus pies respiren y para evitar condiciones cálidas y húmedas que permitan la aparición de hongos. Cambia de calcetines regularmente y deja que tus zapatos se sequen durante al menos 24 horas. Usa chanclas (o evita caminar descalzo) en piscinas públicas, duchas y vestuarios. Revisa regularmente tus uñas e intenta recortarlas con cuidado. Asegúrate siempre de que tu corta-uñas está desinfectado. Y si ves que alguna de tus uñas está dañada, toma medidas rápidamente. Seca tus pies con cuidado después de nadar o de ducharte, y sin olvidar las zonas de entre los dedos. No compartas toallas ni calcetines con otras personas y acuérdate de lavar tus toallas regularmente. Desinfecta tus zapatos frecuentemente con un spray o con polvo antimicótico. Considera la idea de reemplazar el calzado demasiado viejo. Si tienes pie de atleta, debes tratarlo lo antes posible para evitar que la infección de hongos se propague por debajo de las uñas de los pies y más allá de las uñas. Y recuerda, ante cualquier sospecha de infección de hongos en las uñas o de pie de atleta, acude a tu médico o podólogo sin perder tiempo.
Los hongos en los pies son una infección fúngica provocada generalmente por dermatofitos. Esta condición, también conocida como micosis en los pies o pie de atleta, suele aparecer principalmente entre los dedos de los pies y es una afección bastante molesta que puede provocar síntomas como picazón, descamación y ardor en el área. Son tan comunes que 7 de cada 10 personas sufrirán hongos en los pies y un 45% de ellos tendrá infecciones recurrentes durante más de 10 años. Por eso detectarlos y aplicar el tratamiento correcto es esencial para evitar una recaída. El tratamiento para los hongos de los pies debe aplicarse en cuanto se detectan, pues en caso de que no se utilice ningún medicamento antifúngico puede extenderse a otras zonas como las uñas, produciendo hongos en las uñas, una infección mucho más difícil de eliminar. Pero, ¿cómo saber si tienes hongos en los pies? En este artículo de Scholl te explicamos sus causas, los síntomas del pie de atleta y cómo tratarlo para eliminarlo. ¿Por qué salen hongos en los pies? Como hemos adelantado, los hongos o micosis en los pies son una enfermedad infecciosa causada generalmente por unos microorganismos conocidos como dermatofitos. Las causas de los hongos en los pies o pie de atleta son diversas. Normalmente estos organismos se desarrollan debido a las siguientes condiciones: Uso constante de zapatos o calcetines que no permiten que el pie transpire de forma adecuada, favoreciendo la humedad en la zona. No secar bien los pies tras salir de la ducha o la piscina, o colocarse los calcetines o los zapatos con los pies aún húmedos de forma frecuente. Ir descalzos en piscinas, duchas y vestuarios públicos. Debido a que los hongos se contagian fácilmente, si no proteges tus pies en estos espacios cálidos, húmedos y que entran en contacto con muchos pies día a día, es más probable que los adquieras. Estar frecuentemente en un ambiente húmedo y caluroso, por eso pueden ser comunes en atletas, personal que trabaja en piscinas, etc. Uso frecuente de calzado o calcetines muy ajustados, que no favorecen la adecuada transpiración del pie. Compartir objetos de uso personal, como toallas o calzado, con alguien infectado. Esta infección fúngica puede transmitirse por contacto directo con la zona afectada de una persona que padece esta condición, o bien por contacto con superficies y objetos contaminados, como calzados, toallas y suelos. Existen distintos tipos y saber identificarlos te ayudará a reconocer esta condición y a tratarla rápidamente. En nuestro artículo Tipos de hongos en los pies te explicamos más acerca de este punto. Los hongos en los pies interdigitales son de los tipos más frecuentes ¿Cómo saber si tienes hongos en los pies? La micosis en los pies es una condición muy contagiosa, por ello es importante reconocer las señales que suelen presentarse. Estos son los principales síntomas de hongos en los pies: Erupciones en la piel de los pies La primera señal que puede hacernos sospechar que ha habido contagio es la aparición de erupciones cutáneas escamosas de un tono rojizo en la región de los dedos de los pies. Comezón en la zona Otros síntomas característicos son la picazón, especialmente después de quitarte los zapatos, y las descamaciones en la zona afectada. Signos de sequedad y descamación En algunos tipos de micosis en los pies y, sobre todo, cuando los hongos han avanzado bastante al no tratarse la infección, también se han presentado otros signos como la aparición de ampollas y úlceras en los dedos de los pies, además de sequedad y descamación en las plantas. Riesgos de no tratar una infección por hongos Debido a la picazón que provoca en los pies esta infección fúngica, es bastante común rascarse lo cual puede hacer que la infección avance a otras partes de nuestro cuerpo. En el caso de que no hayamos recibido ningún tratamiento, los hongos en los pies pueden propagarse a regiones como las uñas produciendo onicomicosis, además pueden pasar también a las manos o la ingle, provocando en este último caso lo que se conoce como tiña inguinal. Así que, si tienes más síntomas parecidos en otras partes del cuerpo, es posible que se haya producido una propagación del hongo. Tratamiento efectivo para eliminarlos Como hemos adelantado, es muy importante que si tienes algunos de los síntomas indicados apliques un medicamento para eliminar hongos en los pies cuanto antes, de este modo evitarás que avance y que pueda infectar otras zonas de la piel. Generalmente, los productos que se suelen indicar son medicamentos con un efecto antifúngico que eliminan los hongos de los pies o bien que reducen el pH de la piel de esta zona, para obstaculizar y frenar el crecimiento de este tipo de microorganismo. En farmacias podrás encontrar distintas alternativas, como la crema para el pie de atleta Scholmed con Terbinafina, que combate la infección por hongos en los pies en tan solo 7 días. Este medicamento, de fácil aplicación, crea en la piel un reservorio de Terbinafina permitiendo obtener resultados en una semana. No se recomienda su uso a menores de 18 años, además es importante leer la instrucciones de este medicamento y consultar al farmacéutico ante cualquier duda. Este medicamento está indicado para mayores de 18 años, lee las instrucciones de este producto y consulta al farmacéutico. Scholmed es un medicamento de Reckitt Benckiser Healthcare S.A. Sin embargo, sea cual sea el tratamiento que estés utilizando, es importante que la aplicación sea constante y siguiendo las instrucciones del prospecto, es decir será esencial que lo utilices el tiempo indicado en el prospecto del medicamento para terminar definitivamente con este tipo de infección, ya que, de lo contrario, podría volver a aparecer. Remedio casero para hongos en los pies, ¡no gracias! Puede ser que hayas escuchado que algunos ingredientes son buenos remedios naturales para hongos en los pies, como es el caso del bicarbonato de sodio, el aceite de árbol de té o el ajo. Sin embargo su eficacia no está probada y, en lugar de tratar la infección, puede que no surtan efecto. Los hongos son microorganismos de gran resistencia y la mejor forma de combatirlos es con un tratamiento para eliminar hongos en los pies de eficacia comprobada. Consulta a tu farmacéutico y opta por un producto adecuado que te ayude a combatir la micosis. Cómo prevenirlos Aunque es habitual padecer alguna vez esta afección, también es posible evitarla con las siguientes recomendaciones para prevenir los hongos en los pies: Utiliza siempre chanclas en espacios públicos Ya hemos explicado que los espacios públicos de mucho tránsito en los que hay humedad y calor, son ideales para la propagación de hongos en los pies. Para evitarlo, utiliza siempre chanclas o calzado para el agua cuando te encuentres en zonas públicas como piscinas, duchas, saunas o vestuarios, tanto si vas a estos sitios de forma puntual como si trabajas en un espacio de este tipo. ¡No compartas estos objetos personales! Las toallas, calcetines o zapatos son objetos que entran en contacto con nuestros pies, y por tanto podrían albergar hongos, bacterias o virus como el que ocasiona las verrugas o papiloma en los pies. Por es es muy importante que no compartas objetos de uso personal como toallas, calcetines o zapatos on el fin de evitar una posible transmisión de estas condiciones. ¡No olvides que los hongos en los pies son muy contagiosos! Seca bien tus pies Sobre todo entre los dedos, después de cada baño o ducha. No te coloques los calcetines o zapatos con los pies aún húmedos. Recuerda que los espacios oscuros y húmedos son ideales para la propagación de hongos y debemos evitar en lo posible crear este ambiente. Mantén una higiene adecuada Lavar cada día nuestros pies con atención resulta importante para controla cualquier tipo de infección en la zona. Además es necesario cambiar los calcetines diariamente, pues utilizar calcetines sudados aumenta el riesgo de desarrollar hongos en los pies. Elige los zapatos de forma adecuada y rótalos Usa zapatos que favorezcan la transpiración del pie para evitar que se acumule humedad. Es importante que evites los calzados fabricados con materiales como la goma o el vinilo. Esta recomendación es importante tanto en el calzado de uso diario como en el deportivo. Además, es recomendable rotar el calzado y no usar el mismo cada día. Al utilizar un zapato nuestros pies sudan y debemos dar tiempo a que el calzado se seque y ventile adecuadamente para mantener la salud de nuestros pies. Escoge bien tus calcetines Los calcetines también debe favorecer la transpiración, por eso se recomienda que sean de algodón. Si además sufres de sudoración en la zona, aplica diariamente un antitranspirante para pies. Scholmed es un medicamento de Reckitt Benckiser Healthcare S.A. Fuentes: A Closer Look At Topicals for Tinea Pedis
La onicomicosis es una patología frecuente en la población, pero si se trata a tiempo su desaparición es rápida y eficaz. Aunque no es una enfermedad grave, se trata de una infección por hongos en las uñas que afecta su salud y estética, causando alteraciones en las mismas, sobre todo, en cuanto a su color y forma. Si quieres saber más acerca de esta afección, te recomendamos que sigas leyendo este artículo en el que explicamos en qué consiste la onicomicosis, sus posibles causas, síntomas, tratamiento y prevención. Onicomicosis: ¿qué es? La onicomicosis es una infección en las uñas causada por hongos que puede presentarse tanto en las uñas de las manos como de los pies, pero en la mayoría de los casos aparece en estos últimos. Es una patología frecuente y contagiosa que aunque no suele producir grandes molestias iniciales, afecta a la estética de las uñas, haciéndolas parecer más gruesas y con un color amarillento que puede oscurecerse a medida que avanza la infección. Si la onicomicosis es tratada en su primera fase, los resultados suelen ser muy buenos y las uñas afectadas se recuperan completamente. No obstante, debido a que los hongos en las uñas no causan molestias severas en un inicio, son muchas las personas que no acuden al médico hasta que la infección se expande y, por ende, su tratamiento y desaparición son más complicados. Una micosis avanzada puede llegar a causar el desprendimiento total de la uña, provocar dolor crónico de difícil solución e infectar a otras uñas, de ahí la importancia de diagnosticarla cuanto antes y tratarla de forma temprana. Causas de la onicomicosis u hongos en las uñas La causa principal de la aparición de la onicomicosis son los hongos dermatofitos, los cuales tienen la capacidad invadir zonas de la piel queratinizadas, como las uñas y el pelo. El hongo Trichophyton rubrum es el causante de esta patología en la mayoría de los casos, aunque también puede deberse a otros hongos como el Trichophyton mentagrophytes e incluso a levaduras como la Candida Albicans, aunque estas últimas suelen afectar más a personas inmunodeprimidas. Todos estos hongos pueden transmitirse por el contacto directo con una persona infectada o por el ambiente. Además de las causas explicadas, hay una serie de factores de riesgo que favorecen el desarrollo de una infección por hongos en las uñas, entre ellos, se encuentran los siguientes: La humedad proporciona a estos hongos indeseados un acogedor hábitat, por ello, la onicomicosis es mucho más frecuente en verano y en personas con sudoración excesiva. Se adquiere con mayor facilidad en ambientes cálidos y húmedos, como las duchas o piscinas públicas. Haber sufrido pie de atleta o tiña en el pie, una infección por hongos que afecta a la piel y que puede extenderse a las uñas. Vivir con alguien que sufre de onicomicosis, lo que aumenta las posibilidades de que tú la padezcas debido a que compartes espacios como la ducha u objetos personales como las toallas. Ser de la tercera edad, pues con el paso de los años se van acumulando hongos que pueden colonizar el pie y, debido al envejecimiento, las defensas son más débiles, lo que favorece su aparición. Si sufres otra enfermedad de la piel, como la psoriasis, eres más propenso a sufrir de onicomicosis. Contar con un sistema inmune deprimido incrementa también el riesgo de sufrir esta patología. Del mismo modo, cuando sufres diabetes las defensas de tu cuerpo bajan, al igual que con la inmunosupresión, por lo que va a ser más fácil que aparezca este problema. Los problemas de circulación de la sangre en las extremidades posteriores suele ser un factor de riesgo también, aunque poco común. Síntomas de los hongos en las uñas Como hemos mencionado antes, la aparición de la onicomicosis no produce ninguna molestia de tipo dolor o malestar en tu cuerpo, solo afecta a la estética de la uña, por lo que debes prestar mucha atención y saber cómo se desarrolla este problema para detectarlo cuanto antes. Su desarrollo depende del tipo de hongo y la infección, pero en general las personas afectadas presentan los siguientes síntomas: Cambios en el color de la uña. En un inicio, la uña afectada adquiere un color blanquecino, amarillento o presenta manchas o rayas amarillas. A medida que la infección avanza, la uña puede volverse más oscura y llegar a presentar una tonalidad marrón. Engrosamiento de la uña. Fragilidad y agrietamiento de la uña. Desprendimiento de la uña. En una etapa avanzada de la infección, la uña afectada puede llegar a desprenderse por completo, lo que podría causar también dolor, inflamación, enrojecimiento y picazón en la piel de alrededor. Los cambios en el color son uno de los primeros síntomas de hongos en las uñas a los que conviene prestar atención Los hongos en las uñas suelen afectar al dedo gordo del pie, donde se produce la infección y la uña se va volviendo blanquecina o amarillenta en una de las puntas laterales, a partir de ahí la infección se extiende poco a poco hacía la cutícula. Debido a estos hongos, es común que la punta de la uña se rompa y se desprenda, dejando expuesta la piel donde esta descansaba. Puede suceder también que el proceso comience en la cutícula y, luego, se extienda hasta la punta de la uña. Tratamiento de la onicomicosis El tratamiento dependerá de si el hongo ha afectado la raíz o no de la uña. Si el hongo no ha afectado a la raíz de la uña, el tratamiento consiste en aplicar un antifúngico local. Estos productos normalmente pueden adquirirse en farmacias y no requieren de prescripción médica. En Scholl te invitamos a consultar nuestros productos para obtener más información acerca del tratamiento indicado. Cumple con la normativa de productos sanitarios. Cómpralo ahora No obstante, se recomienda acudir al médico si sospechas que estás padeciendo esta afección, para que te examine, te informe de qué tipo de hongo se trata y si la raíz de la uña ha resultado afectada. En este último caso, deberás iniciar un tratamiento médico supervisado por un especialista para combatir el problema y conseguir su total desaparición.
La verruga plantar o papiloma en el pie es una lesión pequeña formada por el desarrollo de células afectadas por el virus del papiloma humano o VPH. Son completamente benignas, pero dependiendo de la zona del pie en la que se ubiquen pueden causar dolor y molestias.El papiloma en el pie se forma en la superficie de la piel, causando un aumento en su grosor y un aspecto verrugoso en la zona afectada, con una lesión que tiene apariencia muy similar a la de una coliflor y en la que muchas veces aparecen pequeños puntos oscuros.Las verrugas plantares pueden aparecer en solitario o de forma múltiple, lo que además de molestias genera un efecto antiestético, por lo que muchos se preguntan qué tratamiento para verrugas plantares aplicar para obtener resultados efectivos.¿Quieres saber más acerca de esta condición y cómo eliminarla? En este artículo de Scholl te explicamos sus causas, síntomas y cómo curar un papiloma en el pie.Cómo se contagia el papiloma en el pieComo ya hemos mencionado, las verrugas plantares o papiloma en el pie se forman como consecuencia del virus del papiloma humano. Aparecen en la capa externa de la piel cuando el virus entra en contacto con el cuerpo mediante grietas o cortes situados en la parte inferior del pie.El contagio se lleva a cabo por contacto directo con el virus y algunos factores son determinantes para facilitar que el virus penetre en el cuerpo: la humedad, el calor, heridas o grietas en la zona del pie, especialmente en la planta, o un sistema inmunológico débil.Por lo general, el virus se desarrolla en ambientes cálidos y húmedos y es frecuente que el contagio de papiloma en el pie se produzca cuando se camina descalzo en lugares públicos, como los vestuarios, las duchas o las piscinas.Por esta razón es tan importante que, si frecuentamos este tipo de espacios, usemos siempre chanclas o zapatos de agua para evitar que la planta del pie quede expuesta.Además, el sistema inmunitario ejerce un papel primordial pues cada persona responderá al ataque del VPH de manera diferente. Por eso quienes por algún motivo cuentan con un sistema inmune más débil, como es el caso de las personas de la tercera edad, o un sistema en desarrollo, como ocurre con los niños, pueden ser más propensos a desarrollar verrugas en los pies si el virus entra a la piel de la zona mediante una herida o grieta.El papiloma plantar también puede transmitirse por contacto directo de persona a persona, aunque no es lo habitual.Síntomas del papiloma en el pieUna vez que se produce el contagio pueden pasar meses hasta que aparece el papiloma en el pie, pero cuando sucede se presenta con las siguientes señales:Lesiones en forma de pequeños bultos rugosos y granulosos que aparecen en la planta del pie y que tienen una apariencia similar a la de una coliflor.Normalmente se encuentran debajo de los dedos del pie, en el talón o en la parte delantera.Alrededor de la verruga en el pie, la piel se engrosa enmarcando la zona de la lesión.Aparecen pequeños puntos negros dentro de la verruga, un síntoma característico de esta condición. Estos pequeños puntos son vasos sanguíneos coagulados.Aunque no todo el mundo siente dolor, puede haber sensibilidad en la zona al pisar o caminar.Cuando se presiona la verruga plantar hacia dentro nos duele, esta es una de las principales señales que nos permiten diferenciar un callo en la planta del pie de un papiloma plantar. También puede haber dolor si se roza la misma al caminar.Las verrugas plantares pueden aparecen en una lesión única o en varias lesiones esparcidas a lo largo del pie, en este último caso se recomienda visitar al médico para recibir un tratamiento que permita eliminar todas las verrugas plantares de forma efectiva.papiloma en la planta del pie sintomasTratamiento de verrugas plantaresDependiendo del tipo de VPH que hayamos contraído y de nuestro sistema inmune, el papiloma en el pie puede desaparecer por sí solo cuando el sistema inmunológico es capaz de eliminarlo por su cuenta.Sin embargo, este tipo de verrugas en los pies suelen ocasionar dolor y molestias al caminar, además en aquellos casos en los que el cuerpo no elimina el virus, pueden aumentar de tamaño e incrementar las molestias, razón por la que se recomienda tratar las verrugas en los pies y no dejarlo pasar por alto.Al momento de elegir un tratamiento para verrugas plantares lo mejor es optar por un producto de venta en farmacias, dejando a un lado los remedios caseros. En la farmacia podrás encontrar diversas alternativas, como Scholl Stop Verrugas.tratamiento verrugas en los pies_SchollCumple con la normativa de productos sanitarios.Cómpralo ahoraEste tratamiento fácil y eficaz, se inspira en el método de congelación con nitrógeno líquido para tratar las verrugas comunes y plantares en adultos y niños mayores de 4 años. Comienza actuar 40 segundos después de su aplicación y el apto tanto para el papiloma en el pie como en la mano.tratar verrugas en los pies en casaSi no estamos seguros de tener una verruga en el pie, lo mejor es consultar a un especialista. De hecho, en caso de diabetes o problemas circulatorios es imprescindible seguir las recomendaciones de un médico antes de aplicar cualquier tratamiento para el papiloma plantar.Si tras aplicar un tratamiento de venta en farmacia el papiloma en el pie no desaparece, también deberemos consultar al médico, que podrá aplicar otro tipo de tratamientos como la congelación por nitrógeno, la extirpación, el tratamiento láser, entre otras opciones que solo podrán ser realizadas por un especialista.No uses remedios naturales para el papiloma plantarAunque es posible que hayas oído hablar de remedios naturales para las verrugas en el pie que ayudan a eliminarlas, como por ejemplo el vinagre de manzana, el limón, el ajo e aloe vera, no es recomendable aplicar este tipo de soluciones para tratar esta condición.La efectividad de estos remedios caseros no está probada y, lejos de curar el papiloma en el pie, no tendrán ningún efecto sobre la lesión y corres el riesgo de que la misma prevalezca, aumentando las molestias.Para eliminar una verruga en el pie, lo mejor es recurrir a un tratamiento farmacéutico desarrollado especialmente para ello o consultar a un podólogo, quien aplicará la solución médica que considere oportuna acorde al tipo de verruga. No dejes la salud de tus pies en manos de los remedios naturales y usa un tratamiento profesional.Consejos para prevenir el papiloma en el pieLa mejor manera de evitar el papiloma en el pie y su tratamiento es incidir en su prevención y, para ello, puedes seguir estos consejos:La piel debe encontrarse hidratada para evitar lesiones por sequedad. Sin heridas en los pies, el virus no encontrará fácilmente vías para penetrar en el cuerpo.Es conveniente utilizar chanclas o zapatos especiales para el agua cuando visitamos espacios como piscinas públicas, ríos o vestuarios. Además si usamos duchas públicas, es necesario hacerlo siempre con chanclas o zapatos de agua para reducir al mínimo el riesgo.Es preferible evitar las duchas y vestuarios de las instalaciones deportivas si somos propensos a padecer verrugas plantares para evitar contagiar y ser contagiados.Los papilomas plantares son muy contagiosos, por eso si alguien en casa tiene una verruga en el pie es necesario tomar ciertas precauciones para evitar que alguien más se contagie, por eso te recomendamos:Limpiar la ducha o la bañera con lejía tras cada uso.Utilizar toallas individuales para secar el pie del infectado que no se usen en ninguna otra zona del cuerpo.No intercambiar ningún tipo de calzado.De igual forma hay que tener mucho cuidado con el auto-contagio, pues el papiloma en el pie se puede extender a otras áreas, como por ejemplo otras partes de la propia planta del pie o pasarse al otro pie.
Los hongos en los pies en niños son frecuentes debido al exceso de sudor por uso de calcetines o calzado inadecuados y a permanecer durante periodos de tiempo prolongados en zonas cálidas y húmedas en verano. La infección por hongos que afecta a la piel de los pies se denomina pie de atleta, una condición que provoca enrojecimiento en la planta del pie y en la zona localizada entre los dedos. Si quieres evitar que tu hijo se contagie, sigue leyendo este artículo sobre las causas, los síntomas y el tratamiento del pie de atleta en niños.Causas de los hongos en los pies en niñosEl pie de atleta suele manifestarse con enrojecimiento y picor en la zona plantar e interdigital. Las causas por las que pueden aparecer hongos en los pies son variadas, además existen una serie de factores de riesgo que pueden aumentar las probabilidades de que este problema afecte a los pies de los niños:Uso de duchas y piscinas públicas sin llevar el calzado adecuado: los lugares públicos húmedos y cálidos son una fuente de contagio bastante frecuente, sobre todo, si el niño pasa periodos largos de tiempo dentro del agua.Uso de calzado cerrado, ya que el pie no transpira correctamente y se impide la evaporación del sudor.Entrar en contacto directo con objetos personales de otras personas que tengan hongos en los pies como, por ejemplo, toallas húmedas, alfombras, etc.En el colegio también puede haber una fuente de contagio, ya que se suelen compartir toallas, alfombras, vestuarios y duchas con otros niñosSufrir de sudoración excesiva en los pies también puede derivar en hongos.Hay que tener en cuenta que los pies son un perfecto habitáculo para los hongos, ya que son una zona húmeda y cálida, por lo que es importante tomar ciertas medidas, que mencionaremos más adelante, para disminuir la posibilidad de su aparición.Síntomas del pie de atleta en niñosCuando el pie de atleta aparece en los pies de los niños, los síntomas que puedes detectar son los siguientes:Enrojecimiento y picor en la zona afectada. Suele empezar entre el cuarto y quinto dedo del pie y, posteriormente, puede extenderse a otros dedos y a la planta.Descamación de la piel, debido a que la infección produce que esta se agriete y forme escamas que en poco tiempo se desprenderán.En algunos casos, pueden presentarse ampollas.Mal olor.En los casos de infección avanzada, podrían verse afectadas también las uñas de los pies e incluso otras partes del cuerpo si el niño se rasca y, posteriormente, toca otras zonas.Ante cualquiera de estos síntomas de hongos en los pies, es importante acudir a un especialista para que realice un buen diagnóstico y prescriba el mejor tratamiento en cada caso.Tratamiento de los hongos en los pies en niñosLa gama de tratamientos para el pie de atleta es variada y si se trata de una infección por hongos en su fase inicial, puedes consultar con el farmacéutico para que te indique un producto apropiado y acorde a la edad del niño. En el caso de infecciones que se encuentran más extendidas o que han avanzado a la uña, es recomendable consultar al pediatra, pues es posible que se requiera de un tratamiento oral para atender esta afección.En la mayoría de los casos, el tratamiento de los hongos en los pies en niños puede realizarse con productos de venta en farmacias. Sin importar cuál sea el tratamiento, el mismo debe aplicarse durante las semanas indicadas y según las recomendaciones del prospecto para obtener resultados eficaces.Claves para prevenir el contagio de hongos en niñosSi quieres evitar que tu pequeño se contagie de esta infección tan indeseada, te recomendamos que sigas esta serie de consejos para mantener sus pies en buen estado:Mantener secos los pies del niño es importante para evitar el contagio de hongos, por eso mismo, debes evitar el calzado de plástico y comprar calcetines transpirables de algodón. Cuando se bañe, especialmente en piscinas y playas públicas, sécale bien los pies, incidiendo sobre todo entre los dedos.Hidrata su piel con cremas o aceites especiales para niños.Intenta evitar que comparta toallas, alfombras de baño, calcetines o zapatos con otros niños.Procura que no camine descalzo por sitios en los que podría contagiarse, los bordes de las piscinas públicas o en vestuarios y duchas públicas.Mantén una buena higiene en los pies del niño, lavándolos con jabón todos los días, especialmente si suda mucho, y secándolos siempre a la perfección.
Son muchos los que se preguntan cómo tratar hongos en los pies efectivamente e impedir que la infección retorne. También conocidos como pie de atleta o micosis, esta infección fúngica está producida por unos microorganismos llamados dermatofitos. La aparición de estos hongos, especialmente entre los dedos y la zona de la planta, suele estar causada por circunstancias como frecuentar lugares húmedos y calurosos, el uso de un calzado inadecuado o ir descalzos en sitios públicos como piscinas, duchas y vestuarios. La micosis es tan frecuente que 7 de cada 10 personas sufrirán infecciones de hongos en la piel y 45% tendrá episodios recurrentes durante más de 10 años. [1] Por ello es importante tratar el pie de atleta lo antes posible, pues esta condición es muy contagiosa y puede propagarse rápido tanto por contacto directo como indirecto. Por tanto, apenas detectemos este problema, lo más recomendable es que lo tratemos de manera correcta, de lo contrario podría extenderse hacia otras zonas del cuerpo, como las uñas o las manos, lo que dificultaría mucho más el tratamiento. En el siguiente artículo, te explicaremos cómo tratar los hongos en los pies efectivamente. Señales de que tienes hongos en los pies Como hemos adelantado, el pie de atleta es una infección fúngica muy contagiosa provocada por unos hongos conocidos como dermatofitos, los cuales aparecen por causas como ir descalzo en zonas públicas, especialmente en ambientes húmedos y calurosos como saunas, piscinas y duchas comunitarias. Es importante saber detectar si los estamos padeciendo para empezar a tratar los hongos en los pies y erradicarlos antes de que las molestias se agraven. Por ello, a continuación te explicaremos los diferentes síntomas que te indicarán si tienes pie de atleta según su grado de evolución: Una de las primeras señales es la aparición de una serie de erupciones en la piel de esta zona, especialmente entre los dedos de los pies. Estas erupciones podrás identificarlas por su aspecto escamoso y su tono rojizo. Otro síntoma de hongos en los pies son los picores, sobre todo justo después de quitarte los zapatos, y la aparición de descamaciones. En algunas variantes del pie de atleta o cuando esta infección está bastante avanzada, pueden aparecer síntomas como ampollas y úlceras en los pies. También es común que provoque otras condiciones como una descamación crónica en las plantas de los pies que, a medida que avance la infección, se extenderá también. Por último, otra señal de que la infección está muy avanzada es cuando se ha propagado a otras zonas del cuerpo como las manos, las uñas o la ingle, condición conocida como tiña inguinal. Las erupciones y descamaciones en la piel son dos de los primeros síntomas de hongos en los pies Claves para tratar los hongos en los pies efectivamente A pesar de que conozcamos algunos de los síntomas que provocan esta afección cutánea, es recomendable que acudamos al médico. El especialista nos ayudará a asegurarnos de que estamos padeciendo esta infección y nos asignará el tratamiento más adecuado, el cual, principalmente, consistirá en la aplicación de productos antifúngicos en los pies. Dependiendo del tratamiento, este puede tener un efecto que actuará matando lentamente a los hongos en los pies atacándolos directamente, o bien puede ir reduciendo el pH de la piel para inhibir el crecimiento de estos microorganismos. En la farmacia existen diversos productos para el tratamiento de los hongos en los pies, como la crema para el pie de atleta Scholmed con Terbinafina, que combate la infección de hongos en los pies de forma eficaz en una semana. La Terbinafina, un antifúngico de amplio espectro, se acumula en la piel y sigue actuando sobre el hongo semanas después de su aplicación, ayudando a eliminar el pie de atleta efectivamente. Este medicamento está indicado para mayores de 18 años, lee las instrucciones de este producto y consulta al farmacéutico. Scholmed es un medicamento de Reckitt Benckiser Healthcare S.A. Ten en cuenta que es importante que apliques el tratamiento escogido durante el tiempo que te indique el prospecto para conseguir tratar la micosis de manera efectiva, pues puede ser muy resistente. Además, en el caso de las personas diabéticas o que tengan algún problema cardiovascular es imprescindible visitar al médico antes de utilizar cualquier tratamiento para los pies por su propia cuenta. Consejos para evitar el contagio de hongos en los pies Aunque es importante saber cómo tratar los hongos en los pies correctamente, también será esencial llevar algunas medidas para prevenir que aparezcan de nuevo. A continuación, te damos unos consejos que te ayudarán a evitar la micosis en los pies: Intenta mantener los pies secos: airear tus pies o ir descalzo de vez en cuando por casa evitará la acumulación de humedad en ellos. Cambia de calcetines frecuentemente: debido al sudor de los pies, la humedad se acumula en esta prenda y en los zapatos a lo largo del día y puede provocar la proliferación de hongos. Usa un calzado adecuado: es importante que evites zapatos fabricados con materiales como el vinilo o la goma, ya que no dejan transpirar adecuadamente a tus pies. Busca siempre zapatos con materiales transpirables para evitar problemas de este tipo en los pies. No compartas tus zapatos: si la otra persona padece este problema, estarás aumentando considerablemente el riesgo de contagiarte, aunque hayáis usado calcetines. No vayas descalzo en lugares públicos: siempre usa chanclas en zonas húmedas como duchas, vestuarios, piscinas o saunas. [1] A Closer Look At Topicals for Tinea Pedis
Imagen dramatizada. La micosis en los pies es un tipo de enfermedad infecciosa causada por la aparición de diferentes tipos de hongos en los pies. Los hongos pueden vivir en las uñas, en los tejidos muertos del cabello e incluso en las capas más externas de la propia piel. Esta condición, también conocida como pie de atleta y es tan común que se estima que 7 de cada 10 personas sufrirán infecciones de hongos en la piel, mientras que el 45% tendrá episodios recurrentes durante más de 10 años. [1] Por esta razón, es recomendable conocer los tipos de hongos en los pies que existen, las zonas en las que se presentan comúnmente y cuáles son los síntomas que se presentan. De esta forma podrás tratarlos antes de que se expandan y se hagan más resistentes y, por tanto, más difíciles de eliminar. Cómo se contagian los hongos en los pies Existen diversas causas que influyen en la aparición de los diferentes tipos de hongos en los pies. Este tipo de microorganismos prospera en ambientes húmedos, cálidos y oscuros, por lo tanto nuestros pies pueden ser un lugar ideal para ellos. Y los siguientes hábitos favorecen el contagio de hongos en los pies: No secar adecuadamente tus pies tras el baño, especialmente entre los dedos. Usar con frecuencia calzado hecho a partir de materiales sintéticos. Estos materiales no suelen dejar respirar la piel, por lo que al no transpirar se humedecerá la zona y puede dar lugar a la aparición de esta condición Utilizar calcetines que no favorecen la correcta transpiración. Lo recomendable es usarlos siempre de algodón. Transitar por superficies húmedas de uso público sin chanclas o zapatos, como es el caso de duchas, vestuarios o piscinas. Compartir zapatos, calcetines o toallas con otras personas. Tener contacto directo con superficies contagiadas por los diferentes tipos de pie de atleta. Puede tratarse de un suelo contaminado o bien de prendas de vestir usadas por otra persona infectada, como los calcetines, las toallas, los zapatos, etcétera. Además, existen algunos factores de riesgo que también es necesario tener en cuenta: Presentar lesiones o cortes en el pie, aunque sean muy pequeños. Tener un sistema inmunológico debilitado. Haber tenido anteriormente pie de atleta y no haberlo tratado adecuadamente, lo que da lugar a una reinfección. Tipos de pie de hongos en los pies Existen varios tipos de pie de atleta, a continuación te los explicamos: Hongos interdigitales Este es el tipo de pie de atleta más común. Como su propio nombre indica, se suele localizar en la zona interdigital, es decir, en la zona interior de los dedos de los pies. No obstante, puede extenderse por todo el pie si no se le da un tratamiento adecuado. Pueden causar otros síntomas como ardor y picazón, además de extenderse a otras zonas del pie si no son tratados a tiempo. Hongos plantares También se conoce como dermatofitosis y se caracteriza por extenderse por toda la zona plantar, de ahí su nombre. Es, básicamente, una descamación de la piel, por lo que es importante actuar a tiempo, evitando que se extienda y que puedan aparecer infecciones secundarias u oportunistas, tanto de otros tipos de hongos, como de bacterias o virus. Suele comenzar como una pequeña irritación, picazón o sequedad en la piel de la planta del pie. Pero pronto notarás que la piel empieza a agrietarse e incluso a molestar bastante. Hongos en los pies vesiculares Es la afección menos habitual del conjunto. Aun así, es importante conocerla porque es también la más molesta de todas, de hecho, produce prurito y dolor localizado. Se suele caracterizar por la aparición de pequeñas ampollas o vesículas llenas de líquido, las cuales se pueden encontrar, principalmente, en la planta del pie. Cómo tratar los hongos en los pies La forma oportuna de tratar los hongos de los pies es con productos de venta en farmacias, la mayoría de los cuales no necesitan receta médica. Ten en cuenta que el hongo no desaparece solo, sino todo lo contrario, se extiende con gran facilidad y puede producir un problema mayor, por eso mismo hay que comenzar a tratarlo desde que lo detectamos. Si no sabes qué tratamiento usar, pregunta a tu farmacéutico de confianza. En Scholl contamos con un medicamento para el pie de atleta que ayuda a combatir el hongo eficazmente. Se trata de la crema para el pie de atleta Scholmed con Terbinafina, que combate la infección por hongos en los pies en tan solo 7 días con una aplicación fácil y rápida. No se recomienda su uso a menores de 18 años, además es importante leer la instrucciones de este medicamento y consultar al farmacéutico ante cualquier duda. Este medicamento está indicado para mayores de 18 años, lee las instrucciones de este producto y consulta al farmacéutico. Scholmed es un medicamento de Reckitt Benckiser Healthcare S.A. Es importante destacar que los hongos en los pies o pie de atleta pueden ser muy resistentes, por lo que no se recomienda recurrir a remedio caseros sino a tratamientos farmacéuticos profesionales para eliminar el problema con eficacia. Importancia de tratar los hongos en los pies Al igual que cualquier tipo de infección, es importante tratar el pie de atleta al menor síntoma para que la eliminación del agente patógeno sea más sencilla. Además, es una enfermedad muy contagiosa, por lo que cuanto más tiempo la tengas tú, más personas de tu alrededor pueden infectarse y más fácil puede propagarse a otras partes de tu cuerpo. La rapidez en la actuación es un factor clave. Cuanto más tiempo pase la infección en tu piel, más complicaciones puedes tener. Por ejemplo, el pie de atleta mal tratado puede ocasionar la aparición de nuevas heridas, llagas o úlceras. Además, cuando la infección pasa a las uñas se puede presentar un cuadro de onicomicosis u hongos en las uñas, lo que afecta la apariencia de las mismas produciendo que estas empiecen a levantarse y descamarse, e incluso pueden llegar a caerse. Así que, si notas cualquier tipo de síntoma de los distintos tipos de hongos en los pies, acude rápidamente a tu farmacia más cercana para comenzar con tu tratamiento lo antes posible. [1] A Closer Look at Topicals for Tinea Pedis Lea las instrucciones de este medicamento y consulte al farmacéutico, Scholmed es un medicamento de Reckitt Benckiser Healthcare S.A.
Imagen dramatizada. v Aplicar un tratamiento par hongos en las uñas apenas detectamos su presencia es fundamental, pues estos organismos no solo afectan de forma estética las uñas, sino que también atacan su salud. Ahora bien, ¿por qué salen hongos en las uñas de los pies? Las causas son muy variadas y, por ello, es importante conocerlas todas. Por norma general, esta infección en las uñas de los pies comienza a manifestarse en forma de una pequeña mancha blanca o amarillenta en la punta de la uña. A medida que evoluciona, hace que la uña cambie de forma, se vuelva más gruesa y cambie de color, volviéndose marrón. También puede producir que esté más frágil de lo habitual y, en los casos más extremos, la uña puede llegar a caerse. Para evitar que esto se produzca, es necesario tratar la infección cuanto antes. Causas de los hongos en las uñas Una vez que lo detectamos, es normal preguntarse por qué salen hongos en las uñas de los pies. Existen diversas causas y factores de riesgo que aumentan la posibilidad de sufrir onicomicosis. Ten en cuenta que los hongos en las uñas de los pies son muy contagiosos, y estas son algunas de las causas que pueden producir su aparición: La humedad en los pies: si sueles tener los pies húmedos, eres más propenso a sufrir hongos en las uñas de los pies. Es importante secarse bien los pies después del baño para evitar la acumulación de humedad en la zona y la aparición de pie de atleta y hongos en las uñas. Ir descalzos por sitios públicos: las duchas, los vestuarios o las piscinas públicas suelen ser usados por una gran cantidad de personas. Teniendo en cuenta que los hongos en los pies son muy contagiosos, ¿por qué arriesgarse? Si vas sin chanclas, es muy probable que termines contagiado. Uso de un calzado inadecuado: esta es una de las causas de los hongos en las uñas de los pies más comunes. Cuando se usan zapatos demasiado estrechos o ajustados el roce de la uña con el zapato puede provocar lesiones ne la uñas que permiten la entrada de hongos en esta zona. Sudoración excesiva: la humedad favorece la aparición de hongos, y no solo cuando no secamos bien los pies sino también cuando hay sudoración excesiva en la zona. Si es tu caso, usa un buen antitranspirante para pies y soluciona el problema. Haber sufrido pie de atleta: el pie de atleta es una infección por hongos en la piel de los pies que puede extenderse hasta las uñas si no se trata de forma temprana. Golpes en las uñas: ¿quién no se ha dado un golpe en esta zona alguna vez? Esto suele ocurrir cuando andamos sin zapatos y tenemos un pequeño tropiezo con un mueble, por ejemplo. Estas pequeñas lesiones suelen provocar fisuras en las uñas que pueden infectarse. Edad: la edad también es un factor a tener en cuenta. Las personas de avanzada edad suelen tener mayores problemas de circulación, así como diabetes u otras enfermedades que afectan directamente al sistema inmunitario y pueden facilitar la proliferación de hongos en las uñas de los pies. El cambio de color en la uña es uno de los síntomas iniciales de hongos en las uñas Tratamiento para los hongos en las uñas de los pies Ahora que ya sabes por qué salen hongos en las uñas de los pies, es importante tener claro que estos no desaparecen solos. Para eliminarlos, es necesario usar un tratamiento adecuado lo antes posible, cuanto más esperes más aumentan las posibilidades de que la infección de una uña pase a las siguientes. Un caso severo de onicomicosis puede ser doloroso e incluso podría causar un daño permanente en las uñas, además de que la infección podría extenderse fuera de las uñas de los pies hacia otras zonas de la piel. Si la infección se detecta a tiempo, puede tratarse con productos especiales de venta en farmacias sin prescripción médica. Tendrás que aplicarlos durante el tiempo recomendado en el prospecto y siguiendo estrictamente las instrucciones que se indican. Estos productos podrán ayudarte a hacer desaparecer los hongos de las uñas de los pies si los usas correctamente. Este es el caso del tratamiento para hongos en las uñas de Scholl que combate el hongo y ayuda a prevenir la extensión de la infección y su reaparición, ofreciendo resultados visibles en cuatro semanas. Es importante que leas las instrucciones del prospecto y lo apliques adecuadamente. Consulta al farmacéutico para más información. Cumple con la normativa de productos sanitarios. Cómpralo ahora Ahora bien, si la infección por hongos en las uñas ya está en un estado avanzado, en el cual la raíz de la uña ha resultado afectada, tendrás que consultar con un podólogo e iniciar un tratamiento médico supervisado por este especialista. Los remedios naturales para hongos en las uñas no son efectivos Seguro que has leído sobre muchos remedios naturales para hongos en las uñas de los pies, como el ajo, el limón, el vinagre, entre otros. Los remedios caseros no tienen efectividad comprobada y no son un tratamiento para la onicomicosis. Los hongos son organismos tremendamente resistentes, y un producto natural no consigue acabar con ellos. Al usar este tipo de soluciones permites que el hongo siga avanzando y mientras más avance más difícil será tratarlo. Además, dependiendo del remedio natural que apliques, puedes poner en riesgo la salud de tu uña o favorecer que la infección se extienda hacia otras uñas saludables. Si tienes un hongo, consulta al farmacéutico o al podólogo y deja la salud de tus pies en manos profesionales. Prevenir la reaparición de hongos en las uñas de los pies Una vez superada la infección, es fundamental tener en cuenta algunas claves para poder prevenir la reaparición de la onicomicosis: Usa siempre chanclas o calzado en vestuarios, duchas y piscinas públicas. Evita los calcetines húmedos. Escoge unos que absorban el sudor o cámbialos por otros a lo largo del día. Usa además un antitranspirante para pies para controlar la sudoración excesiva. Elige un calzado que permita que los pies transpiren adecuadamente y opta por materiales de calidad. Lávate los pies diariamente y de forma adecuada. Además, procura secarte bien los pies tras el lavado, no dejes ninguna zona húmeda antes de calzarte. Evita las uñas postizas o los esmaltes de mala calidad, pues pueden dañar la uña ocasionando grietas y fisuras que permitan la entrada de hongos. Al cortar tus uñas, recuerda desinfectar el cortauñas y cualquier otro utensilio con alcohol antes y después de su uso para reducir el riesgo de infecciones, especialmente si lo compartes con alguien más. Si sueles hacerte la pedicura en centros de belleza, elige un espacio en el que cuiden la higiene y desinfecten los productos. [1] Footcare Issues, Incidence & Treatment Rates. Harris Interactive. Global Report, March 2018
Los callos son un problema más común de lo que puede parecer, y es que más de un 35% de los españoles tiene callosidades en los pies[1]. Los callos en los pies se pueden definir como unas protuberancias que se caracterizan por contener piel endurecida y de tacto escamoso y que generalmente aparecen en esta zona debido a una presión excesiva. Aunque estos pequeños bultos no suelen representar un problema grave de salud, es importante que tomemos algunas precauciones para no padecerlos. Pero ¿cómo evitar los callos en los pies? Si quieres saber cómo prevenir callos en los pies, te recomendamos que sigas leyendo este artículo donde te daremos una serie de consejos para que puedas mantener esta zona del cuerpo libre de este tipo de afecciones epidérmicas. ¿Qué son los callos y por qué aparecen en los pies? Los callos son una afección epidérmica que consiste en la aparición de pequeños bultos en algunas partes de nuestros pies, especialmente en las puntas y los costados de los dedos. Además, estas protuberancias también se distinguen por otros síntomas como: Resequedad o piel cerosa alrededor del bulto Endurecimiento e inflamación justo en el centro del callo Sensibilidad o dolor en la zona, especialmente cuando presionas en la dermis afectada La principal causa de la aparición de callos en los pies es la constante presión y fricción que se ejerce en esta zona debido a algunas acciones que repetimos de forma diaria, como pueden ser las siguientes: Uso de calzado inadecuado para nuestro pie: un zapato ajustado o que tenga un tacón demasiado alto puede apretar el pie. También puede suceder si el calzado nos queda grande o si el pie se frota constantemente contra una textura dentro del zapato. No utilizar calcetines: esta prenda puede prevenir callos en los pies, ya que su falta de uso aumenta la fricción que se genera en los pies. Además de estas causas, existen algunos factores que aumentan el riesgo de padecer este problema, como tener juanetes, dedo del pie en martillo u otras condiciones en el pie, como los osteofitos. Claves para prevenir los callos en los pies Como hemos indicado, la principal causa de la aparición de estas protuberancias es la presión constante en el pie, por lo si queremos prevenir los callos en los pies tendríamos que tomar algunas medidas que nos ayuden a reducir esa fricción. Por tanto, a continuación, te explicaremos cómo evitar los callos en los pies con las siguientes recomendaciones: Usa calzado cómodo para los dedos de los pies: unos zapatos que dejen espacio en la zona de los dedos puede ayudar a reducir la presión en la zona. Si todos tus zapatos son demasiado ajustados, puedes pedirle a un zapatero que te los estire. Utiliza recubrimientos que protejan tu pie: en el mercado existen diferentes opciones para proteger la zona sensible y evitar los roces, como los parches para callos de Scholl, que proporcionan un alivio inmediato a las molestias. También puedes probar separadores de dedos para dejar más espacio en ellos. Escoge un calzado con material cómodo: los compuestos orgánicos evitan la formación de estas protuberancias, por lo que la elección de un calzado de material adecuado podría ser la solución. Utiliza calcetines fabricados con materiales suaves: es recomendable que tus medias o calcetines sean lisos (es decir, sin ningún diseño) y que no contengan costuras muy gruesas, ya que los acabados de este tipo de calcetines pueden aumentar el roce entre los dedos de los pies y provocar durezas. Si finalmente te ha aparecido un callo en los pies, es recomendable aplicar un tratamiento tópico para eliminarlo y reducir las molestias que ocasiona. Para ello, consulta primero con tu médico o especialista. Tratamiento para los callos en los pies Es importante seguir los anteriores consejos para evitar los callos en los pies, pero si aún así aparecen, aunque no se trate de un problema grave de salud, es recomendable que utilicemos algún tratamiento para evitar las molestias que pueden ocasionar. Para reducir el dolor provocado por el roce, podemos utilizar el protector de dedos de Scholl, que ayuda a aliviar el dolor, la presión y el roce ocasionados por esta condición. Sin embargo, además de este tipo de producto, es recomendable que también apliquemos adicionalmente un producto especial para eliminar los callos. En la farmacia encontrarás diversas alternativas para combatir este problema, como el tratamiento para callos de Scholl, indicado para callos encima de los dedos y en la planta del pie, con resultados visibles en 5 días. Cumple con la normativa de productos sanitarios. Cómpralo ahora Consulta a tu farmacéutico para más información y recuerda que si padeces de diabetes o problemas circulatorios es imprescindible que consultes a tu médico antes de aplicar cualquier tratamiento tópico en tus pies. Para eliminar los callos que ya se han formado en los pies no es recomendable que utilicemos bajo ningún concepto remedios caseros como limas o cortaúñas, ya que este tipo de productos pueden dañar la piel y, como consecuencia, agravar el problema provocando una infección. Si quieres eliminar esta afección del pie, lo adecuado es recurrir a un tratamiento profesional o consultar a un profesional sanitario para encontrar una alternativa de aplicación segura y que dé resultados eficaces. [1] Footcare Issues, Incidence & Treatment Rates. Harris Interactive. Global Report, March 2018
¿Te ha aparecido una capa gruesa en la planta del pie y no sabes qué puede ser? Aunque se conocen popularmente como callos en la planta del pie, en realidad se denominan queratosis plantares o durezas. Se presentan cuando la parte externa de la piel se vuelve más gruesa debido a la acumulación de células muertas en esa zona. Sin embargo, no hay que confundir este problema con las verrugas plantares, ya que estas se producen por el Virus del Papiloma Humano, el cual se introduce en nuestro cuerpo a través de las lesiones que tengamos en la zona del pie. Aunque no se trata de un problema grave de salud, es recomendable que utilicemos algunos tratamientos para quitar callos en la planta del pie y evitar las molestias que los mismos causan. ¿Quieres sabes cuáles son las formas más eficaces de eliminar las durezas en la planta del pie? Sigue leyendo este artículo donde, además, te explicaremos por qué se producen las queratosis plantares y cómo podemos prevenirlas. Causas de los callos en la planta del pie Como ya hemos adelantado, las queratosis plantares, conocidas comúnmente como callos en la planta del pie, consiste en el engrosamiento de las capas más superficiales de la piel de esta parte del cuerpo. La principal causa de los callos en la planta del pie es la fricción o la presión constante que se produce en esta zona, lo cual activa un mecanismo de protección de la piel que provoca este engrosamiento debido al aumento de células muertas en la zona plantar, especialmente, en los talones y la región metatarsiana. Pero, ¿cómo se produce la fricción en esta parte del pie? A continuación, te explicaremos qué factores influyen en la aparición de durezas en la planta del pie: Uso de calzado inadecuado: los zapatos demasiado ajustados o con una punta estrecha pueden ejercer más presión de lo normal en nuestro pie, favoreciendo la aparición de estos callos. También aquellos zapatos que no ofrecen la amortiguación adecuada pueden favorecer la formación de callos en la planta del pie. No usar calcetines de forma habitual: algunas personas prefieren utilizar zapatos cerrados sin calcetines, pero esta costumbre favorece el roce y una mayor presión en el pie, dando origen a callos en la zona. Apoyo incorrecto del pie: una pisada incorrecta o no apoyar bien el pie debido al tipo de calzado que usamos, por ejemplo los tacones, puede ejercer más presión en una región que otra del pie al caminar puede aumentar las durezas plantares. Falta de hidratación en el pie: la deshidratación de la piel es un factor que favorece la acumulación de descamaciones y células muertas, especialmente, en los talones. Ciertas condiciones en el pie: las personas con juanetes, dedo del pie en martillo u otras patologías son más propensas a desarrollar queratosis plantares. Síntomas de los callos plantares Para distinguir entre este tipo de durezas y otras condiciones que aparecen en esta zona, como las verrugas plantares, es importante distinguir los síntomas de los callos en la planta del pie. A continuación te los detallamos: Área de piel engrosada y endurecida en la planta del pie. La zona endurecida se presenta un poco más elevada que el resto de la piel. La dureza tiene un color ligeramente amarillo Descamaciones o piel reseca en la zona Al tocar la queratosis, la piel se siente áspera y falta de hidratación. Este tipo de callos, aunque por sí solos no suelen doler, pueden generar molestias en la zona tras pasar un rato caminando. Tratamiento para callos en la planta del pie Quitar callos en la planta del pie no es una misión imposible, pero para conseguirlo es recomendable que inicies un tratamiento específico para este problema que te permita suavizar nuevamente la zona y reducir las molestias, además de tomar medidas para evitar que estas durezas se sigan formando. Por eso lo mejor es consultar al farmacéutico sobre las distintas alternativas que existen. Una de ellas es el Tratamiento para callos de Scholl, adecuado tanto para callos encima de los dedos como en la planta del pie, que alivia las molestias y proporciona mejoras visibles en 5 días. Cumple con la normativa de productos sanitarios Cómpralo ahora El tratamiento para callos en la planta del pie de Scholl es rápido y efectivo, además puede usarse para tratar varios callos. Sin embargo no deb aplicarse en callos neurovasculares y ojos de gallo. Si sufres problemas circulatorios o diabetes, se recomienda consultar al médico antes de aplicar cualquier tratamiento en los pies. Además, es recomendable cambiar algunos hábitos para quitar los callos en la planta del pie de forma efectiva: Usa siempre calcetines con los zapatos cerrados para reducir la presión y el roce. Usa zapatos de tu talla y cómodos, evitando aquellos que resultan muy estrechos en la parte delantera. Además, es importante que ofrezcan una buena amortiguación. Aumenta la amortiguación que ofrecen tus zapatos utilizando plantillas de gel con tu calzado, lo que te permitirá caminar de forma cómoda reduciendo el impacto al que están sometidos tus pies. Si padeces de condiciones podológicas, como juanetes o dedos en martillo, visita al podólogo para que te recomiende el calzado más adecuado que te ayude a evitar callos en la planta del pie. Sin embargo, si a pesar de utilizar los métodos que te hemos indicado, los callos en la planta del pie persisten y se vuelven tan dolorosos que llegan hasta dificultar tu rutina diaria, será imprescindible que acudas al médico para que te asigne un tratamiento más adecuado. Cómo prevenir callos en la planta del pie Si has tenido en el pasado durezas en los pies, es bueno que sepas que prevenir los callos en la planta del pie es posible siguiendo algunas simples recomendaciones: Elige bien el calzado: como ya hemos apuntado, es importante escoger zapatos cómodos, que amortigüen y que tengan el espacio adecuado para nuestro pie. Cambia habitualmente de zapatos: rotar el calzado es importante para impedir que la fricción se produzca siempre en la misma zona del pie. Mantén tus pies hidratados: aplica a diario cremas humectantes específicas para esta zona para evitar la descamación. Limita el uso de zapatos con tacón alto: de esta manera, evitarás ejercer más presión en unas zonas que en otras de los pies.
Si tienes una capa gruesa de piel en alguna zona del pie seguramente sea porque te han aparecido callos. Los callos, también conocidos como ojos de gallo o durezas en los pies, son unas protuberancias que aparecen por el engrosamiento de las capas externas de la piel, debido a un calzado que hace demasiada presión en el pie o que no se ajusta bien y produce roce. Sea cual sea la causa, esta afección en los pies puede producir algunas molestias como dolor y resequedad en la zona afectada, por lo que es importante utilizar algunos productos como los parches para callos que te ayudan a reducir estos síntomas inmediatamente. Pero, ¿sabes cómo usar los parches para callos correctamente? Los parches para el ojo de gallo en el pie son un producto que te puede ayudar a reducir de manera efectiva las molestias provocadas por esta afección. Por ello, si quieres saber detalladamente para qué sirve este tratamiento y la forma correcta de utilizarlos, entonces te recomendamos que sigas leyendo estas líneas. ¿Por qué tengo callos? Los callos, también conocidos como ojos de gallo, son un problema epidérmico bastante común entre la población. De hecho, más de un 35% de los españoles tiene callosidades en los pies[1]. Sin embargo, ¿sabes por qué aparecen este tipo de durezas? La causa principal de esta afección es la constante fricción que sufre la piel de esta zona. Esta continua presión activa un mecanismo de defensa de la epidermis, el cual va provocando un engrosamiento de la piel de los pies (sobre todo en zonas como los talones y la región metatarsiana), para ofrecer mayor protección a la zona, y esto produce acumulación de células muertas y descamaciones en las capas externas de la piel. Aunque esta es la razón principal por la que aparecen los callos en los pies, también existen otros factores que aumentan la probabilidad de tener estos bultos endurecidos en la piel como, por ejemplo: Tener otras afecciones en el pie: algunos problemas como los juanetes o dedo martillo en el pie, entre otras patologías, pueden aumentar el riesgo de padecer callos en los pies. Uso de calzado poco adecuado: un zapato demasiado estrecho o ajustado puede aumentar la presión o la fricción en los pies, lo cual ya hemos visto que es la causa principal de los callos. Apoyo incorrecto de los pies: este gesto puede provocar que ejerzamos más presión en unas regiones del pie que en otras. Tener la piel seca en los pies: la falta de humedad puede favorecer un mayor engrosamiento de la piel, ya que se estará acumulando más cantidad de células muertas. ¿Para qué sirven los parches para callos? Aunque los callos no son una condición grave, sí puede ser molesta, ya que este problema puede provocar síntomas como dolor leve, resequedad en la piel y la aparición de protuberancias o áreas de piel engrosadas y endurecidas que, incluso, dificulten acomodarse el calzado. Por ello, es importante que utilicemos algunos productos específicos para reducir algunas de estas molestias como es el caso de los parches para callos. Los parches para ojos de gallo son un producto que podemos encontrar en cualquier farmacia y que resulta especialmente útil cuando estas protuberancias son dolorosas, porque su doble capa de molespuma alivia las molestias de forma inmediata y reduce la presión en los pies. Cómo usar los parches para callos de Scholl Como hemos indicado anteriormente, los parches son un producto adecuado para reducir las molestias provocadas por este problema epidérmico pero no un tratamiento como tal, por lo que si quieres eliminar definitivamente estas callosidades tendrás que iniciar un tratamiento específico que te permita suavizar de nuevo la zona afectada. Los parches para callos Scholl de Molespuma proporcionan un alivio inmediato del malestar ocasionado por los callos dolorosos sobre y entre los dedos. Utilizarlos es muy fácil, solo debes seguir estas instrucciones: Limpia y seca bien tus pies antes de usar los parches para callos. Extrae el papel adhesivo el dorso de la almohadilla. Coloca en posición centrada sobre el callo o el punto doloroso, con la cara adhesiva en contacto con tu piel. Presiona el parche en la zona para garantizar que el mismo se fije y evitar así las molestias en la zona sensible. Recuerda que este producto es solo para uso externo y con el fin de aliviar el dolor y molestia causada por los callos. Si quieres eliminarlos, te recomendamos consultar nuestro artículo Cómo quitar los callos. Cumple con la normativa de productos sanitarios. Cómpralo ahora Consejos para prevenir los callos Si aún no has desarrollado callos en tus pies, todavía estás a tiempo de prevenir este problema dérmico en los pies con los consejos que te daremos a continuación: Usa un calzado adecuado para tus pies: escoger unos zapatos que tengan suficiente espacio y no provoquen presión en tus pies te ayudará a evitar este problema. No utilices siempre los mismos zapatos: si usas todos los días el mismo calzado la fricción se producirá siempre en la misma región de tus pies. Hidrata diariamente tus pies: aplica productos humectantes específicos para esta zona para evitar la aparición de descamaciones y engrosamientos. No uses zapatos con tacón alto: es recomendable que evites este tipo de calzado para que el pie no ejerza más presión en unas zonas que en otras. [1] Footcare Issues, Incidence & Treatment Rates. Harris Interactive. Global Report, March 2018