Los tacones, cuanto más altos y estrechos, mayores probabilidades tienen de causar problemas. Esto se debe a la postura forzada que se adopta al caminar con ellos, que es lo que explica por qué los tacones causan dolor en el pie, por ello no es raro que tras un día usándolos nos preguntemos cómo aliviar el dolor de pies por tacones.
Al elevar el talón, el peso del cuerpo no se reparte por todo el pie, sino que se concentra en la parte delantera, más hacia la punta cuanto más alto sea el tacón. Esta posición que se ve obligada a adoptar el pie es antinatural. Por eso, fuerza huesos, articulaciones, músculos y tendones pudiendo generar diversas molestias.
De todo ello se deriva la importancia de no abusar de los tacones y de utilizarlos de forma moderada, optando por los modelos más cómodos para evitar el dolor de pies por tacones. Pero, si tras su uso tienes molestias y quieres reducirlas, sigue leyendo y descubre cómo aliviar dolor de pies por tacones y descansar esta zona.
Tanto si nos ponemos este tipo de zapatos por gusto como por obligación, es conveniente seguir las recomendaciones para evitar que los tacones nos causen dolor. Y es importante hacerlo porque el uso frecuente de zapatos que te hacen daño puede tener consecuencias sobre nuestra salud.
Dolor en la planta del pie, ampollas, callos encima de los dedos y ojos de gallo son algunos de los trastornos más asociados a los tacones.
Para evitar el dolor de pies por tacones y disminuir sus consecuencias, te ofrecemos las siguientes recomendaciones:
Acostumbra el pie a los zapatos de manera paulatina y no los utilices durante muchas horas el primer día. Lo ideal es irlos estirando en casa o en breves usos antes de utilizarlos durante un día entero o en una celebración especial.
Asegúrate de que la talla que lleves sea la adecuada para tu pie. Los tacones muy pequeños o más grandes que tu talla habitual pueden ocasionar roces y molestias que pueden convertirse en ampollas y callos.
Evita los tacones estrechos adelante, pues estos modelos son los más propensos a causar callos y a comprimir los dedos. Mejor escógelos anchos y cuadrados o con plataforma para aumentar el apoyo del pie.
Es preferible que la altura del tacón sea inferior a los 5 cm para evitar molestias, especialmente si no estás acostumbrada a llevar zapatos altos. Si prefieres los tacones muy altos, las plataformas son una gran opción pues causan menos molestias en la planta del pie y ofrecen un mejor soporte a la zona.
La puntera del zapato es mejor que sea redondeada antes que terminar en punta para que el pie adopte una postura más cómoda y natural. Si eliges un modelo de punta estrecha, asegúrate de que no te aprieta adelante y que no comprime los dedos de tus pies.
Un zapato de calidad, fabricado con materiales transpirables y que proporcione sujeción sin apretar es siempre la mejor opción. Así evitarás rozaduras, ampollas y molestias.
Si los tacones forman parte de tu rutina diaria y buscas una opción para hacerlos más cómodos, entonces las plantillas pueden ser una gran opción para ti.
La gama de plantillas para tacones de Scholl aportan la comodidad que buscas. Si utilizas tacones de más de 5,5 centímetros, entonces puedes optar por las plantillas Scholl para tacones muy altos.
En el caso de que suelas usar zapato más bajos, las plantillas para tacones de uso diario te aportarán el confort extra que necesitas. Ambas alternativas ayudan a amortiguar la pisada, concentrándose en la zona del antepié y ofreciendo soporte al arco del pie.
Gracias a su tecnología GelActiv, ofrecen comodidad incluso para tacones más extremos, con un diseño con relieves para prevenir el deslizamiento, por eso son las mejores aliadas para llevar esos zapatos altos día a día de forma cómoda.
Pero si a pesar de seguir estos consejos estos zapatos te hacen daño, te explicamos cómo aliviar el dolor de pies por tacones y sentirte mejor.
Evitar el dolor de pies por tacones no siempre resulta posible. En ocasiones es inevitable utilizar calzado que sabemos que no es del todo apropiado.
Para estos casos, se hace necesario quitar el dolor de pies por esos tacones de la forma más rápida posible en cuanto llegamos a casa y podemos descalzarnos. Los consejos para aliviar este dolor son los siguientes:
Calor y frío para tus pies: sumerge tus pies en agua caliente durante unos cinco minutos y luego alterna con agua fría otros cinco minutos. De esta forma, activamos la circulación sanguínea.
Agua caliente y sal gorda: sumerge tus pies en un recipiente con agua caliente a la que añadiremos sal gorda de uso culinario o cualquier otra sal específica para este tipo de baños. Este sencillo método, todo un clásico de las abuelas, alivia la tensión, suaviza y calma el dolor de pies por tacones o zapatos incómodos.
Añade una infusión a tu baño de pies: para los baños también pueden utilizarse infusiones como la manzanilla, tomillo o salvia. Debido a sus propiedades calmantes y desinflamatorias, ayudan a aliviar el dolor y reducir la inflamación en la zona.
Estira tus pies: realizar algunos ejercicios te ayudará a recuperar la postura natural del pie. Andar descalzos, intentar recoger objetos con los dedos, mover una pelota a lo largo de la planta del pie, estirar los dedos hacia adelante y hacia atrás durante unos segundos, estirar los gemelos o efectuar movimientos circulares con todo el pie son algunos de los ejercicios recomendados para estirar y relajar los músculos de la zona y quitar el dolor de pies por tacones.
¡Date un buen masaje!: un masaje en la zona con una crema hidratante para pies proporciona un alivio inmediato ayudándote a combatir el dolor y la inflamación.
Eleva tus pies y descansa: con el propósito de estimular la circulación en la zona y reducir la inflamación, se recomienda descansar con los pies elevados sobre una almohada o sobre el respaldo de tu sofá, por ejemplo. Mantenlos alzados 10 minutos y notarás la diferencia.
Por supuesto, cualquier herida que nos hayan podido causar los tacones, debe ser desinfectada y protegida con apósitos para que no se agrave ni nos duela cuando nos volvamos a calzar.
Con todos estos consejos para evitar y aliviar el dolor de pies por tacones podrás usar tus zapatos favoritos sin comprometer el bienestar de tus pies.